EL HOMBRE QUE LE ROBABA A DIOS
Había una vez un hombre que se caracterizaba por ayudar, de diferentes formas, a las personas, sin embargo, tenía un pequeño defecto: presumía sus buenas acciones.Cierta noche soñó que seLeer más…
Reflexiones de Fermín Felipe Olalde Balderas
Ideas para ser y vivir mejor
Había una vez un hombre que se caracterizaba por ayudar, de diferentes formas, a las personas, sin embargo, tenía un pequeño defecto: presumía sus buenas acciones.Cierta noche soñó que seLeer más…
Carlos y su esposa María estaban disfrutando sus alimentos cuando ella le platicó que pensaba acudir por la tarde a la cerrajería ya que necesitaban obtener una copia de laLeer más…
Esa mañana amaneció soleada y Juan salió a trabajar como todos los días. Nunca se imaginó que por la tarde llovería tan fuerte cuando iba de regreso a su casa.Leer más…
Yo vivía una vida normal en el siglo I d. C. en la región de Judea, pero un día empecé a sentir que se me caía la piel, era lepra.Leer más…
Un día iba caminando hacia mi trabajo cuando vi que en un puesto de revistas la primera página del periódico difundía la foto y la noticia de la liberación deLeer más…
Un diez de mayo, Anita de nueve años y Pepe de seis destinaron sus pequeños ahorros para comprarle un regalo a doña Mary, su mamá. Era un frutero de maderaLeer más…
—Oye hermano quiero pedirte un gran favor —exclamó Juan— ¿podrías prestarme quinientos pesos? Fíjate que tuve que hacer algunos pagos y me quedé sin dinero para subsistir en la semana.Leer más…
El día del accidente recuerdo haber escuchado un ruido estruendoso y visto cómo el parabrisas estallaba en mil pedazos, después escuché la sirena de la ambulancia y las voces deLeer más…
Un día yo caminaba por una de las calles de San Miguel de Allende cuando me encontré a un amigo que vive en esa ciudad. Platicamos un poco y meLeer más…
Es viernes, ha pasado la hora nona y estoy de pie contemplándote desde lejos porque mi cobardía me impidió acercarme. Como siempre, las mujeres son las que demuestran el valorLeer más…
Era un Domingo de Ramos cuando yo estaba disfrutando de una rica nieve frente al Templo de Nuestra Señora de la Asunción, en el Barrio del Zapote, en Celaya. ElLeer más…
—Buenas tardes, busco al señor Juan González. —A sus órdenes joven, soy yo —respondió el hombre de edad avanzada cuando abrió la puerta. —Mi nombre es Víctor y soy nietoLeer más…
—Mmmm…¡Está riquísima la salsa abue! —exclamó Celia.Ya se había hecho una tradición que en las reuniones familiares disfrutaran de una comida acompañada con una rica salsa roja especialidad de laLeer más…
El jardinero y su hijo llegaron temprano a trabajar en el jardín de la señora Gómez. Tenían que cortar el césped, podar dos árboles y quitarle las hojas secas aLeer más…
Yo era un simple muchacho israelita de doce años y ese día salí temprano de mi casa para pescar en el Mar de Galilea. Le prometí a mi madre queLeer más…
—¡Apúrale Mín que vamos a llegar tarde al juego! —gritó mi amigo Turín de diez años de edad, yo tenía doce.Habíamos esperado con ilusión ese día porque los jugadores delLeer más…
Recuerdo que yo vivía feliz, pero no sé qué me pasó ni en qué momento me perdí. Sucumbí ante las tentaciones que nos presenta el mundo y empecé a tomarLeer más…
Yo estaba trabajando como ejecutivo de ventas en una empresa importante de nuestro país y un día mi jefe me comentó que una compañía japonesa estaba interesada en conocer nuestrosLeer más…
Un sábado mi familia y yo estábamos en casa y muy entrada la noche mis hijos empezaron a contar experiencias paranormales. Comenzó mi hija mayor, le siguió mi esposa yLeer más…
Su esposa ya había fallecido y él estaba por seguir sus pasos, pero antes de morir externó una frase que desconcertó a sus dos hijos:—Espero que sepan aprovechar la herenciaLeer más…
Hace unos años estaba atravesando por un problema bastante fuerte y no podía dormir por la preocupación, pero luego caí en un profundo sueño.De pronto me encontré sentado en unaLeer más…
Entré a la tienda de regalos y sonó la campanita que se encontraba adherida a la puerta.—Buenos días. —Buenos días —contestó el dependiente, un hombre muy amable de unos setentaLeer más…
Eran las tres de la mañana cuando desperté sin una razón aparente. Me senté a la orilla de la cama y de pronto sentí una presencia en mi habitación. MiréLeer más…
Ese día salí corriendo de mi casa y atravesé la calle sin fijarme que venía un vehículo a toda velocidad. Sentí el golpe fuerte y quedé tirado en el pavimento.Leer más…
Era como la una de la tarde de un día de verano del 2019 cuando Felipe estaba de pie, junto a otras personas, en la banqueta, frente al paso peatonalLeer más…
Hace unos días me encontré a un gran amigo y me platicó que como a las cinco de la mañana un grupo de seis sujetos forzaron la puerta y entraronLeer más…