Las 50 más recientes

ROSAS BLANCAS ADONAI Y EL JONRONERO LA BELLEZA ESTÁ EN EL AMOR JESÚS GARCÍA, EL HÉROE DE NACOZARI UNA NOCHE EN LA VIDA DE UN ESCRITOR COOPER UNA MARAVILLA DE LA CREACIÓN DÍA DE REYES UNA NAVIDAD INOLVIDABLE EL NIÑO DEL SHORT ROJO EL OFTALMÓLOGO DON FELIPE (23 ANIVERSARIO LUCTUOSO) UN ENCUENTRO INESPERADO EL HOMBRE DE LA GABARDINA NEGRA LAS CELULAS UNA MAÑANA DE SABADO VIVIR DEL ARTE JOSÉ Y EL NIÑO DEL LUNAR EN LA MEJILLA DON SANTIAGO NORMAS BÁSICAS PARA UNA BUENA CONVERSACIÓN JASIEL (Una historia de amor, valor y responsabilidad) ADONAI Y EL CARÁCTER DE EMMA UN LUNES CUALQUIERA ADONAI Y EL MISTERIO DE LAS PALABRAS EXTRAÑAS ENAMORADA DE CRISTO UN AMIGO INCONDICIONAL EL ESTILO DE DIOS LA CHICA DEL AVIÓN UNA MANCUERNA EXTRAORDINARIA LA LAVADORA ENAMORADO DE LA LECTURA DOÑA ANITA EL VIAJERO LA CULPA ¡LIBÉRATE! UNA GRAN MUESTRA DE AMOR LA JUNTA EL BARRIO DEL ZAPOTE, MI BARRIO EL SENCILLO MENSAJE DE JESÚS UNA LEYENDA MAYA TURÍN, MI GRAN AMIGO DEL ALMA CARTA DE LOS REYES MAGOS LA IMPORTANCIA DE AGRADECER UN MILAGRO DE NAVIDAD EL NIÑO TODOS NECESITAMOS DE TODOS SABER PEDIR DE REGRESO A CASA DON FELIPE EL BAR

La-casa-de-la-tierra.png

Hace unos días mi hija nos invitó, a mi esposa y a mí, a presenciar una conferencia en “La Casa de la Tierra” o “Tierra Nuestra”, un Centro de Educación Ambiental que se encuentra en Celaya, Guanajuato.

Entramos a un auditorio. Las luces estaban apagadas. Después de que mi vista se adaptó a la oscuridad calculé que en ese lugar podíamos caber unas cien personas. Las butacas estaban acomodadas en círculo. En el centro, colgaba una pantalla en forma circular.

Una joven integrante del personal de ese centro nos dio la bienvenida y nos guió en un recorrido virtual. Nos proyectaron imágenes satelitales, al parecer provenientes de la NASA, a través de las cuales pudimos ver nuestro sistema solar.

Conocimos de cerca los ocho planetas —Plutón ya no es considerado como tal— y pudimos ver en vivo y a todo color los elementos que los componen.

Y cuando pasaron las imágenes de nuestro planeta pudimos apreciar lo hermoso que es. Lleno de vida y de color. Se puede ver el azul de los océanos, el verde de los bosques y las zonas ocupadas por asentamientos humanos. Vimos la movilización de la gente en rutas de vuelo en cada continente, todo en tiempo real. Yo estaba asombrado.

Sin embargo, nos proyectó una imagen de cómo estaba la tierra hace cincuenta años y al compararla con la actual se ve cómo han disminuido notoriamente las zonas verdes, se han contaminado ríos y mares y se ha incrementado el calentamiento global.

Y lo más preocupante fue cuando nos mostró una proyección de cómo estaría nuestra tierra en el año 2100 si no hiciéramos cambios en nuestra forma de vivir. No quiero exagerar pero lo considero grave. Si no tomamos conciencia la gente que vivirá en esa época (posiblemente nuestros nietos y sus nietos), afrontarán temperaturas muy altas y escases de agua y de alimento entre otras cosas.

Ya lo empezamos a ver desde ahora. Recordé una noticia referente a la falta de agua que padecen nuestros paisanos en el Estado de Nuevo León.

El evento logró su objetivo, movió nuestra conciencia. Analizamos qué cosas podemos hacer desde ahora para contribuir a que nuestra casa, la Tierra, no se deteriore más. Cuidar el agua, las plantas, los árboles, evitar el uso de materiales que dañen la capa de ozono, evitar la contaminación en nuestras ciudades, ríos y playas y en general respetar la vida.

Me quedó claro que necesito reforzar el aspecto ecológico, ya tomamos conciencia, ahora el compromiso es hacerlo.

Fermín Felipe Olalde Balderas
Author: Fermín Felipe Olalde Balderas

Escritor, autor de los libros y de las reflexiones publicadas en este portal.

0 0 votos
Calificar la publicación
guest
0 Comentarios
Comentarios en línea
Ver todos los comentarios
0
Quisiera conocer tu opinión, por favor comentax

Ingresar