Hay quienes piensan que una persona con una buena educación es aquella que cuenta con altos estudios académicos. No siempre es así.
Una vez visité un ranchito de los muchos que hay en nuestro país y me quedé admirado porque la mayoría de las personas me saludaban sin conocerme. Saludar, es una de las muchas muestras de una buena educación.
Cuentan que en una ocasión dos profesionistas iban en la camioneta de uno de ellos, de esas que cuestan más de medio millón de pesos. En el trayecto Iban tomando un refresco. De pronto, el que conducía abrió la ventanilla y tiró la lata vacía.
—¿Por qué hiciste eso? –le preguntó su compañero.
—¿Hice qué?
—Tiraste la basura en la carretera.
Hizo un gesto de indiferencia y siguió manejando. Tirar basura en la calle o en carretera es de mala educación.
Escupir o tirar basura en la calle, llegar tarde a una cita, estacionarte en un lugar prohibido o no saludar son solo algunas de las faltas de educación que a veces cometemos.
Pienso que en nuestro país debemos promover, principalmente con el ejemplo, todos aquellos hábitos y actitudes que nos hagan ser mejores personas.
La educación va más allá de obtener conocimientos o títulos académicos. Debe reflejar el respeto y buen comportamiento de los habitantes que decimos amar a México.
Author: Fermín Felipe Olalde Balderas
Escritor, autor de los libros y de las reflexiones publicadas en este portal.

